Entendiendo La Culpa
La culpa es un sentimiento que parece surgir con frecuencia en personas que padecen hemofilia y otros trastornos hemorrágicos graves. Una madre o un padre pueden sentirse culpables por ser portadores. Un hermano o una hermana pueden sentirse culpables por causar sangrado o moretones. La persona con trastorno hemorrágico puede sentirse culpable por causarle problemas a su familia. La culpa es un sentimiento muy poderoso que todos tienen en algún momento. Si lleva una gran carga de culpa, puede aplastarle. Es por esa razón que todos debemos trabajar en ello.
Aprendemos a sentirnos culpables cuando somos niños. A medida que crecemos, todos aprendemos ciertos valores. La culpa es un recordatorio para que actuemos de acuerdo con esos valores. La culpa nos dice cuando hemos hecho algo mal. Sin embargo, muchos de nosotros nos sentimos culpables por cosas que están fuera de nuestro control.
Si se siente culpable por algo que ha hecho, reflexione sobre lo que hizo. ¿Su acción realmente estuvo mal? ¿Fue algo que le enseñaron que estaba mal cuando era niño, pero que ahora no cree que esté mal? Si realmente ha hecho algo malo o hiriente, admítalo ante usted mismo y acéptelo. Recuerde que no es una persona perfecta. Discúlpese con cualquier persona a quien haya lastimado. Haga lo que pueda para que todo esté bien. Decida intentar no volver a hacer lo mismo. Luego deje las cosas atrás.
A veces, cuando nos sentimos culpables, la culpa en realidad solo oculta otro sentimiento. Al ponerse en contacto con ese otro sentimiento, podrá deshacerse de su culpa. La culpa puede ser en realidad ira o resentimiento que siente y que no puede dejar salir. La ira puede ser hacia usted mismo o hacia otra persona. Si puede ponerse en contacto con la ira que ha enterrado, estará en camino de lidiar con la emoción real. Una vez que admita la ira, puede encontrar formas de dejarla ir.
La gente se aferra a la culpa por muchas razones. Algunas personas la utilizan para castigarse a sí mismas. Algunos utilizan la culpa para evitar ver lo que realmente está sucediendo y el papel que desempeña en ello. Algunos utilizan la culpa para evitar acercarse a los demás o evitar el éxito. Por alguna razón, mantener la culpa sobre sus hombros no le permite seguir con su vida. Si la culpa le agobia, piense en lo que está obteniendo de ella o qué emoción puede estar ocultando su culpa.